El paisaje seco y duro de Mendoza está a punto de vivir una transformación sin precedentes. El Gobernador Alfredo Cornejo y la subsecretaria de Infraestructura y Desarrollo Territorial, Marité Baudi, visitaron el avance del acueducto Monte Comán-La Horqueta, una megaobra que busca revolucionar la producción ganadera en el sur provincial. Acompañados por figuras clave del sector, como el director de Ganadería de Mendoza, Roberto Ríos, y el secretario de la Cámara de Comercio de San Rafael, Bernardo Mercado, recorrieron los tramos avanzados de un proyecto que ya tiene el 80% de ejecución.
Este acueducto de 291 kilómetros de cañerías no es solo una obra más, sino el inicio de una nueva etapa para las explotaciones agropecuarias de la región. Con 83 puntos de entrega y un reservorio estratégico, el sistema permitirá una distribución eficiente del agua, mejorando la competitividad y la sostenibilidad del sector ganadero, que hasta ahora ha sido víctima de la aridez extrema y la escasez de agua de calidad.
Una apuesta por el crecimiento y la sostenibilidad
El Gobernador Cornejo fue claro en sus declaraciones: “Esta obra es fundamental para desarrollar el secano, una zona que tiene un enorme potencial pero que no se ha podido explotar debido a la falta de agua. Con este acueducto, 89 propiedades dedicadas a la explotación agropecuaria podrán aumentar significativamente su producción”. Y es que la ganadería en Mendoza, a pesar de sus dificultades históricas, está llamada a convertirse en un sector de alta productividad gracias a este nuevo suministro de agua apta para los animales.
Con la tecnología de telemetría incorporada en la operación del acueducto, los costos de mantenimiento se reducirán considerablemente, brindando a los productores la oportunidad de administrar mejor sus recursos. “Los propios ganaderos gestionarán el acueducto una vez finalizado, y además, reembolsarán parte de la inversión, lo que asegura la sustentabilidad del proyecto a largo plazo”, subrayó Baudi.
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Ganadería de calidad: una nueva era para Mendoza
Bernardo Mercado, secretario de la Cámara de Comercio de San Rafael, destacó que el acueducto no solo mejora la competitividad, sino que da previsibilidad a un sector que históricamente ha luchado contra la escasez de agua. “Este proyecto va a mejorar patrimonialmente a los productores, mejorará las crías y dará estabilidad a toda la cadena productiva. La carne es una necesidad en todo Mendoza, y con esta obra, se abren nuevas posibilidades para ahorrar, invertir y crecer”, afirmó.
Por su parte, el presidente del Clúster Ganadero de Mendoza, Eduardo López, estimó que la productividad en la zona del secano podría aumentar en un 30%, una cifra que podría cambiar el panorama económico de la región. “El agua de calidad es un recurso indispensable para mejorar la salud y el rendimiento de nuestros animales, y hasta ahora, el agua disponible era demasiado salina. Esta obra nos permitirá pensar en nuevas categorías de producción que antes eran imposibles”, explicó López.
Infraestructura estratégica para el futuro
El acueducto Monte Comán-La Horqueta, con su reservorio en la intersección de Ruta Provincial 153 y Ruta Nacional 146, no es solo una solución inmediata para el problema del agua, sino una apuesta estratégica para el futuro de la ganadería y otras actividades económicas en el sur mendocino. El plan de desarrollo territorial que acompaña esta obra incluye también la construcción de una sede de bomberos para el manejo del fuego, una necesidad recurrente en los veranos de esta zona.
Mientras tanto, el avance del 80% deja en claro que el proyecto va por buen camino, con la colocación de las bombas y cañerías casi finalizadas. "Estamos cada vez más cerca de cumplir con un sueño que transformará la ganadería de Mendoza y abrirá nuevas puertas al crecimiento económico", declaró el director de Ganadería, Roberto Ríos.
Un proyecto que combina tradición y modernidad
La obra, iniciada en la primera gestión de Cornejo en 2015, se ha consolidado como un emblema del desarrollo territorial en Mendoza. La incorporación de tecnologías de punta, como la telemetría, y el modelo de gestión cooperativa entre el Estado y los productores son señales de un enfoque moderno hacia la infraestructura rural.
Al finalizar la visita, Cornejo se reunió con representantes del sector privado y destacó el potencial que todavía tiene la ganadería mendocina por explotar: “El mercado está esperando lo que podemos ofrecer. Tenemos la calidad y el talento para conquistar nuevos mercados y con esta obra, tendremos también los recursos para hacerlo”.