La empresa tiene en mente según trascendieron cuatro grupos en 3 cuencas distintas: Tierra del fuego en cuenca Austral, Malargüe y el norte de Neuquén las cuales corresponden a la cuenca neuquina, y el norte de mendoza perteneciente a la cuenca cuyana.Las mismas fueron definidas por Fernando Giliberti jefe del departamento de proyectos especiales.
La oferta más grande es la del norte de Neuquén en cuanto a volumen, produce 3243 m3/d de crudo y 147 km3/d de gas. Malargüe cuenta con una producción de 1214 metros cúbicos por día y 174 kilómetro cúbicos de gas por día. Tierra del Fuego cuenta con 256 m3/d de petróleo y 1254 km3/d de gas y Mendoza Norte 2242 m3/d de petróleo y 16 km3/d de gas.
A pesar de la generosa oferta de Neuquén la provincia genera cierto resquemor en los directivos de la petrolera teniendo en cuenta que allí se encuentra Rincón de los Sauces, Puesto Hernández y Chihuido de la Sierra Negra. El desafío sería el de lograr que estos bloques no sean una carga para seguir trabajando en otros yacimientos como por ejemplo Vaca Muerta.
“Ambas áreas producen una buena cantidad de crudo y algo de gas. Son muy buenos prospectos, sin embargo se trata de áreas maduras depletadas y con necesidad de fuertes inversiones en infraestructura de fondo y superficie. Hay mucho sulfuro y corrosión de los caños.Incluso hay inventarios que YPF hizo hace mucho tiempo y no están actualizados. Te pones a revisar y te encontrás que faltan cosas, o se cambiaron generadores por modelos viejos o que no están los AIB que figuran en la planilla. Mil cosas difieren entre el papel y el campo. No se trata solo de poner un equipo de pulling, sino de una fuerte inversión en fierros (overhead)”, afirmó un experimentado ingeniero conocedor del área.
Sergio Affronti, CEO de YPF afirmó“Analizamos un grupo de áreas convencionales maduras, tanto de petróleo como de gas, que podrían ser elegibles para una desinversión potencial si concluimos que podrían ser operadas de forma más eficiente por un operador más flexible y de nicho, permitiéndonos asignar nuestros recursos en los activos en los que podemos crear un valor mayor para nuestros accionistas. Seguiremos analizando nuestro portfolio de activos no operativos y no estratégicos y avanzaremos con una potencial monetización si su valuación resulta razonable”. El mandamás de la empresa estatal contó el plan para desprenderse de áreas maduras en la reunión con empresarios.
Los vencimientos de las concesiones son en el corto plazo y los interesados deben ingresar como operadores bajo el mando de YPF hasta hacer renovación de la concesión. De no ser así, por Ley, volverá a la provincia licitada. El 70% sería de la empresa estatal argentina y el 30% del socio que usufructúa la zona después en el tiempo y con la producción incremental los porcentajes se revierten.
Para la petrolera de bandera esto no sería muy rentable. “Esto implica una eficiencia extrema y muy ajustada para que el negocio sea rentable y eso requiere un plazo largo para poder recuperar la inversión”, agregó una fuente con amplios conocimientos del tema.