A partir de este miércoles 1 de septiembre en todos los niveles.
Las escuelas dependientes de la Universidad Nacional de Cuyo pasaron desde hoy de la bimodalidad a la presencialidad total y plena. Así lo afirmó la resolución 2300/2021 del rector Daniel Pizzi, en la que propicia que pueda darse un agrupamiento único en aulas y salones, respetando un “distanciamiento cuidado e inteligente”.
La medida abarca, en lo inmediato, a los alumnos del nivel inicial y del primer, segundo y tercer ciclo de la escuela Carmen Vera Arenas, dependiente de la Facultad de Educación. Y también a los colegios secundarios dependientes de la Secretaría Académica: Escuela de Comercio Martín Zapata, Colegio Universitario Central, Escuela de Agricultura de General Alvear, Escuela del Magisterio y Departamento de Aplicación Docente. Estos, en sintonía con lo que ocurre en la provincia, tenían hasta ahora clases alternando presencialidad y la virtualidad, distribuidos en dos burbujas.
En el caso del Liceo Agrícola y Enológico, se delega en la Dirección General de Educación Secundaria (DiGES), en conjunto con las autoridades del establecimiento, las facultades pertinentes para desarrollar y establecer un cronograma de mayor presencialidad hasta obtener el 100%, conforme a la evolución de su situación edilicia.
En la resolución firmada por Pizzi -ad referéndum del Consejo Superior- se contempla también que la DiGES dispondrá de todas las facultades que sean necesarias para efectuar el control y seguimiento de los casos que puedan presentarse en los Colegios bajo su jurisdicción. Como así también, proceder a las convocatorias del personal respectivo y de alumnas y alumnos para efectuar actividades presenciales áulicas bajo la modalidad presencialidad total y plena, con distanciamiento cuidado e inteligente, conforme la delegación establecida en la Res. 2100/2020-R.
Entre otros fundamentos, la normativa promueve que se instaure una distancia interpersonal “que permita llevar adelante una educación de calidad que se proporcione en las aulas de estos establecimientos educativos y que respete todas las medias preventivas que exigen los protocolos sanitarios aprobados”. Detalla el uso permanente de tapabocas, higiene frecuente en las manos, ventilación adecuada, determinación de la mayor distancia posible entre bancos de los cursos o aulas que posibiliten una distancia mínima prudencial y con una organización de los estudiantes en grupos y su asignación de manera tal que los agrupamientos más numerosos ocupen las aulas más grandes, lo que permitirá mantener la mayor distancia posible, sanitización del aula y de los espacios comunes.
Por último, establece que las situaciones no previstas en los Protocolos aplicables serán debatidos en los ámbitos paritarios Docentes y Nodocentes de esta Universidad, de acuerdo con las circunstancias especiales que ameriten su convocatoria.