La reconocida bodega mendocina, propiedad de la familia Swarovski, tiene como objetivo centralizar la producción de sus afamados vinos espumantes, que hasta el momento se encontraba tercerizada. Esta inversión también permitirá duplicar la capacidad productiva, pasando de 2 a 4 millones de botellas al año.
El proyecto de expansión de la bodega, impulsado por una sólida demanda tanto a nivel nacional como internacional, cuenta con el respaldo financiero del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y el programa Crédito Argentino (CreAr). Su principal meta es ampliar las exportaciones de sus exquisitos espumantes.
Durante el último año, los espumantes de Norton se exportaron a 72 países, incluyendo destinos tan destacados como Estados Unidos, Holanda, China, India y Francia, generando ingresos por un total de u$s 20 millones. Esta alta demanda impulsó un incremento del 24 por ciento en la producción.
La implementación de esta moderna nave industrial no solo conllevará un aumento del 5% en la plantilla de empleados, sino que elevará el número de colaboradores a más de 500 personas.
Según el ejecutivo de la bodega, “Esta industria se caracteriza por ser altamente intensiva en inversión de capital de trabajo. Dado el tiempo de elaboración que nuestros productos a menudo requieren, con meses o incluso años de maduración en barrica, contar con capital disponible para continuar invirtiendo es fundamental”.
El financiamiento proporcionado por el BICE también permitirá optimizar el proceso de fraccionamiento tanto para vinos como espumantes en toda la bodega, además de expandir el catálogo de espumantes de Norton.
A pesar del reciente levantamiento de las retenciones anunciado por el ministro de Economía, Sergio Massa, en julio y efectivo a partir de septiembre para las exportaciones de vino, el impacto en la industria vitivinícola aún no ha alcanzado las expectativas. Esta medida eximió a los productores del 4,5% de retenciones y se estima que el sector ahorrará aproximadamente u$s 40 millones al año, según cálculos del Instituto Nacional Vitivinícola (INV).
Según los últimos datos del INV, las exportaciones sufrieron una caída por noveno mes consecutivo en septiembre. En los primeros nueve meses de 2023, Argentina exportó aproximadamente 147 millones de litros de vino, una cifra 61 millones menor en comparación con el mismo periodo del año anterior, lo que representa una disminución del 29,3 por ciento.
Del total exportado, 114,6 millones (77,9%) correspondieron a vinos fraccionados, que experimentaron una reducción del 26%.”