Un hombre desató el horror en un centro comercial de Bondi Junction, ubicado a unos 6 kilómetros de Sídney, Australia, al apuñalar mortalmente a seis personas este sábado. Además, varias personas resultaron heridas en el incidente. Ocho de los heridos, incluido un bebé, fueron trasladados con urgencia a hospitales cercanos. El atacante, de 40 años, fue abatido en el lugar por una agente.
Penny Sharpe, Primera Ministra de Nueva Gales del Sur, expresó su consternación ante los informes de múltiples víctimas, ofreciendo sus pensamientos tanto para los afectados como para los equipos de rescate y aquellos que presenciaron los espantosos sucesos.
Según el subcomisionado de la policía de Nueva Gales del Sur, Anthony Cook, el agresor actuó solo. Según relató en una conferencia, el hombre ingresó a un restaurante en Bondi Junction alrededor de las 3:10 de la tarde, salió brevemente del centro comercial y regresó aproximadamente diez minutos después.
La tragedia se desató justo antes de las 4 de la tarde, momento en que los servicios de emergencia fueron alertados de múltiples apuñalamientos en Westfield Bondi Junction. La Policía emitió un comunicado instando a la población a evitar la zona mientras las investigaciones continúan en curso, sin proporcionar detalles adicionales sobre el incidente.
El motivo detrás del ataque permanece desconocido en este momento. Inicialmente, el subcomisionado Anthony Cooke sugirió que no se podía descartar la posibilidad de un acto terrorista, aunque más tarde las autoridades moderaron esa posibilidad.
La Policía informó que el agresor, un hombre de 40 años, podría ser conocido por los servicios de seguridad, pero aún no ha sido identificado formalmente. Aparentemente, actuó solo, como indicó previamente el primer ministro australiano, Anthony Albanese. Desde la comisaría explicaron que "si realmente es la persona que creemos, en ese caso no se trata de un incidente terrorista".
Imágenes de cámaras de seguridad, difundidas por medios locales, muestran a un hombre corriendo por el centro comercial con un cuchillo de grandes dimensiones en la mano, mientras varias personas heridas yacen en el suelo. Una inspectora de policía disparó al sospechoso una vez que este se dio vuelta y levantó el cuchillo.
El primer ministro Albanese elogió el coraje de la agente, calificándola como una verdadera heroína cuyo acto valiente sin dudas salvó vidas.
Ayush Singh, empleado de una cafetería en el centro comercial, presenció el horror del ataque. "Lo vi todo frente a mí", relató a la AFP. Describió el caos de la gente corriendo, el agresor con el cuchillo y la huida de los clientes. Singh ayudó a dos clientas mayores a refugiarse dentro del local y luego escuchó los disparos que pusieron fin al ataque. "Fue aterrador", compartió, revelando que, aunque lleva seis años allí, nunca antes había sentido temor como ese día.
Pranjul Bokaria, otra testigo, estaba de compras cuando se desencadenó el ataque. Corrió a una tienda cercana y se resguardó en una sala de descanso, describiendo la escena como espantosa, con personas llorando. Logró escapar por una salida de emergencia junto con otros clientes y empleados, sintiéndose agradecida por seguir con vida.
Otros testigos relataron escenas de pánico, como Reece Colmenares, quien estaba camino al gimnasio y se vio obligado a refugiarse en una tienda con otras personas cuando escuchó gritos sobre el apuñalamiento. Colmenares describió el miedo en el rostro de las personas, incluyendo niños y ancianos, mientras permanecían resguardados en una habitación cerrada durante horas.
Mientras tanto, un supermercado se convirtió en un lugar de refugio para aquellos que estaban en la zona durante el ataque.
A pesar de que este tipo de ataques son poco comunes en Australia, con la noche cayendo, el área seguía siendo un escenario activo con la presencia de numerosos policías y ambulancias frente al centro comercial, listos para trasladar a los heridos a los hospitales cercanos.
Es importante señalar que estos incidentes son raros en Australia. En noviembre de 2018, un individuo armado con un cuchillo perpetró un ataque similar en Melbourne, que fue reivindicado por el grupo yihadista Estado Islámico, cobrándose la vida de una persona e hiriendo a otras dos antes de ser abatido por la policía.
El hombre que enfrentó al atacante del shopping de Sidney
Las imágenes captadas durante el ataque en el centro comercial Bondi de Sídney son impactantes, mostrando el terror que se desató cuando una persona armada con un cuchillo apuñaló y cobró la vida de al menos seis personas, incluido un bebé. Sin embargo, en medio del caos, surgió un acto de valentía que podría haber evitado una tragedia aún mayor.
Un hombre, armado solo con un bolardo, similar a los que se utilizan para formar filas en cines y aeropuertos, se enfrentó al terrorista en una escalera mecánica, logrando detener su avance y potencialmente salvando vidas adicionales.
Vestido con una camiseta blanca y jeans, este hombre ha sido aclamado en las redes sociales como "la personificación de la valentía", "un héroe absoluto" y "una leyenda divina", merecedor incluso de una medalla de la Orden de Australia.
Un video corto publicado por el portal The Sydney Morning Herald muestra el momento exacto en que este individuo enfrenta al atacante en la escalera mecánica. La grabación, sin sonido, captura el instante en que el "héroe" se encuentra en lo alto de la escalera, apuntando hacia el atacante con el bolardo y moviéndose hacia él con determinación.
En una secuencia cinematográfica impresionante, el hombre comienza a descender mientras el atacante se acerca con el cuchillo en mano. Después de segundos de extrema tensión, el video se detiene sin mostrar el desenlace del enfrentamiento. Sin embargo, se sabe que posteriormente el agresor fue confrontado por una agente policial y abatido de un disparo.