El balance de la cantidad de etapas de fracturas que se realizaron para poner en producción nuevos pozos en Vaca Muerta marcó que el 2021 fue un año de un récord absoluto, ya que por primera vez en una década que lleva de trabajos la formación shale se superó el techo de las 10.000 punciones.
De acuerdo al informe especial que elabora el country manager de la empresa NCS Multistage, Luciano Fucello, si bien diciembre cerró con una baja del 23,88% en relación con noviembre, al haberse realizado 854 etapas de fractura, el 2021 arrojó un balance final de nada menos 10.252 punciones realizadas.
Con este ritmo de punciones, el 2021 cerró definitivamente como el año récord en Vaca Muerta, ya que en 2019 había tenido su mejor año con apenas 6405 etapas completadas.
De ese total se destaca que YPF fue la compañía que realizó la mayor parte de las punciones, con un total de 5.084 etapas de fractura completadas en 2021 en Vaca Muerta.
La segunda operadora más activa fue por muy poco Pan American Energy (PAE) que realizó en el año 1.167 etapas de fractura, mientras que Shell quedó apenas un paso detrás con 1.142 punciones realizadas en el año.
El gráfico de los últimos años muestra el crecimiento de las etapas de fractura del 2021.
La lista se completa con Vista con 914 etapas, Tecpetrol con 889, Pluspetrol con 360, ExxonMobil con 297, Total con 234, Chevron con 94, Phoenix con 46 y Pampa Energía con 35.
En el caso de Chevron y Phoenix son empresas que son nuevas en el sector ya que recién en 2021 comenzaron a fracturar sus propios pozos, ambas en desarrollos ubicados en el norte de Vaca Muerta.
El 2021 tuvo un amplio espacio y condiciones que permitieron que la cantidad de etapas de fractura realizadas para poner en producción nuevos pozos de Vaca Muerta fueran todo un récord, pero el 2022 se encuentra con un escenario completamente diferente, en el que será complicado para las firmas mantener el alto nivel de desarrollo.
El año pasado se vivió en la primera mitad del año un gran impulso por el Plan Gas.Ar. La producción nacional había caído tras dos años de falta de inversión y las operadoras tomaron el plan de estímulo como un trampolín.
Pero ese desarrollo llevó al tope la capacidad de los gasoductos y hará que para este año solo se sumen trabajos para combatir el declino productivo y no para elevar la producción, salvo que desde Nación se autoricen finalmente exportaciones de gas durante el invierno.
En el petróleo el 2021 tentó a muchas empresas no solo a capturar el incremento de la demanda nacional que se dio tras la salida de la cuarentena, sino también los altos precios internacionales que se obtuvieron, en especial en el segundo semestre.
Pero nuevamente la capacidad de transporte amenaza con poner si no un freno, un punto límite al cual habrá que seguir muy de cerca.
Fuente Diario Rio Negro
