El caso de Maia revela un “déficit de políticas públicas para niños en situación de calle”.
La defensora de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Nación, Marisa Graham, aseguró que la desaparición de Maia, la niña de siete años que fue llevada por un hombre en bicicleta el lunes pasado, pone de manifiesto “el déficit de políticas públicas en materia de niños en situación de calle” que en la Ciudad de Buenos Aires se caracteriza por “bajos subsidios y pocas plazas disponibles en paradores”.
Esta situación “pone de manifiesto de la forma más cruel un fuerte déficit en materia de políticas públicas para abordar el desamparo que viven las niñas, niños y adolescentes que están en situación de calle”, expresó Graham.
La defensora sostuvo que “en países cuyo índice de pobreza es elevado y donde se hacen presente con agudeza las desigualdades sociales, el problema de personas que habitan las calles en las grandes ciudades y sus suburbios es muy agudo”.
Según datos del Indec “la pobreza alcanza actualmente a 6 de cada 10 niños y la indigencia a 2 de cada 10“.
“Esta situación estructural se ve agravada en el mundo y en nuestro país en particular por la afectación de la pandemia. La misma ha elevado los números de pobreza e indigencia que golpean especialmente a las poblaciones de niñas, niños y adolescentes“, resaltó.
Graham aseguró: “Todas las grandes ciudades y sus conurbanos del país deben contemplar políticas para paliar esta situación y atendiendo el interés superior del niño“.
El sistema de Alerta Sofía fue defendido por Graham. El mismo fue implementado por el Gobierno nacional para actuar en este tipo de casos. Además, instó a que “la niñez y adolescencia en situación de calle permanezcan en la agenda política. Por lo menos, hasta que se resuelva su protección efectiva en el corto plazo”.