Este miércoles, tras pisar suelo argentino, Wanda Nara visitó su nuevo local de cosméticos en el Shopping Abasto. Antes de las 20 —horario de llegada de la empresaria— ya habían miles de personas esperando para recibirla y tomarse fotos junto a ella, además de la prensa.
La "diva de Milán" fue entrevistada a solas por LAM y allí comentó la emoción y felicidad que tenía por su negocio de make up. Luego, Ángel de Brito se fue adentrando tanto en su relación con Mauro Icardi como en la situación actual de lo que fue un escándalo con China Suárez.
Acerca de su esposo, delantero del PSG, le preguntaron por qué el futbolista no la había acompañado en esta oportunidad. Relajada, ella explicó que estaba bien y que él había tenido que quedarse por sus entrenamientos: “Estoy normal. Son cosas que pasan habitualmente, solo que yo conté todo”.
En la misma línea, De Brito le preguntó si se seguían pasando factura tras el conflicto. Sin dudarlo, Wanda aseguró: “Nadie le debe nada a nadie. Yo conozco a los personajes de esta historia y ya sé cómo se maneja cada uno”.
Momentos después, llegó el tema de la entrevista con Susana Giménez. Sobre el programa, expresó que estaba planeado desde antes que estallara el escándalo, y que decidieron cambiar el formato porque no quería fingir felicidad luego de todo lo que había pasado. “Me parecía muy hipócrita hacer un especial y que me vean en un parque de diversiones, sin ser clara sobre la situación que se veía en la redes y en los programas”, relató la mediática.
“Había un contrato desde antes y yo propuse que hicieran una nota. Me pagaron una fortuna, pero tengo muchos hijos que mantener”, disparó Wanda Nara entre risas. Respecto al tratamiento que tuvo el affaire de Mauro Icardi y la China Suárez, la mediática se mostró conforme: “No hay nada más para hablar. Ya se habló todo: desde las cosas que eran reales, hasta las que no. Me cuesta caretearla. Algunas cosas estuvieron exageradas, pero en definitiva ya pasó”.
“Cuando te exponés, te matan. Hace muchos años que estoy en esto, estoy acostumbrada”, lanzó, contundente.
El último tema que se tocó fue el del hackeo que sufrió Wanda con su cuenta de Instagram. Además de explicar que Yanina Latorre la había ayudado a recuperar su cuenta de Instagram, contó que también había sufrido otra intrusión en su privacidad en los últimos meses.
“Me hackearon una página y me pidieron 30 mil dólares para recuperarla”, reveló y añadió que se había negado a pagarle a las personas que le habían robado la web.