“El acoso escolar en sí mismo no es un delito, pero es importante resaltar que, si como consecuencia del acoso, la víctima es golpeada, empujada, sufre situaciones de robo de sus pertenencias de manera intencional, como así también, si los acosadores amenazan a la víctima, la coaccionan, la injurian, ejercen violencia sexual, todo lo mencionado constituye delitos penales muy graves que tienen pena de prisión” explica la Doctora Sofía Burad