El audio de Paola Tacacho, asesinada la semana pasada, revela la historia de acoso y violencia machista. La novia de la víctima apuntó contra la familia del agresor por no hacerse cargo de él y organizaciones sociales adelantaron que presentarán un pedido de juicio político contra uno de los jueces que intervinieron en la causa
“Me quiero sentir por fuera de esto, sé que no me tiene que molestar, sé que son mensajes vacíos que no tienen sentido, sé que físicamente el chabón no me va a hacer nada, pero no puedo evitar ponerme loca cuando me llegan, me arruinan el día”.
Así se refería Paola Tacacho al acoso sistemático de Mauricio Parada Parejas, el hombre de 32 años que había sido su alumno en la carrera de traductorado de inglés en 2015 y que el viernes pasado la siguió cuando salió del gimnasio, la asesinó de seis puñaladas y se suicidó en plena calle.
En el audio donde se escucha la voz de Paola, que fue difundido por la periodista tucumana Mariana Romero, la profesora de inglés se refería a la incomodidad y la molestia que le producían todas las intimidaciones que Parada llevó a cabo durante cinco años y que la impulsaron a denunciarlo en total 14 veces por acoso, violencia de género y amenazas. Incluso llegó a demandarlo por daños y perjuicios en un juzgado civil y comercial tucumano. Varias de esas actuaciones derivaron en restricciones de acercamiento que su ex alumno desobedeció en reiteradas oportunidades.
Según relataron su novia, amigos y familiares en declaraciones a la prensa, el hostigamiento de Mauricio a Paola incluía desde publicar mediante cuentas falsas imágenes suyas con mensajes intimidatorios y amenazas de muerte –como “se acerca la hora de desaparecer” o “I am dead” (estoy muerta)– hasta pasar cerca de su casa o seguirla en sus trayectos al trabajo.
Ella misma lo afirma en el audio donde se queja de que su acosador tenía acceso irrestricto a sus datos personales a través de la Justicia. “Todas las veces que hice denuncias me pedían datos y a veces recibía llamadas de números de acá, obviamente privados, atendía y se quedaban mudos. Eran cuando todo esto estaba en pleno proceso de ebullición”, decía Paola. “Cuando ellos van y le muestran la denuncia, porque él va con el abogado, él se pone a observar todas esas cosas, ¿me entendés? Y no dudo de que haya visto teléfonos o el mail, porque son datos que me pedían cuando estaba tramitando todo por ahí en su momento”.
Familiares y amigos de la docente realizaron este lunes por la tarde una movilización en la plaza Independencia de San Miguel de Tucumán, frente a la Casa de Gobierno provincial, en reclamo de justicia. Belén, una prima de la víctima, declaró que a Paola “el Estado la desprotegió y desamparó” a pesar de la decena de denuncias que radicó contra el agresor, y organizaciones de derechos humanos adelantaron quepresentarán ante la Legislatura tucumana un pedido de juicio político contra el juez Francisco Pisa, que intervino en una de las denuncias de Tacacho y no adoptó las medidas para proteger a la víctima.
Según informó la agencia Télam, la profesora había conseguido una prohibición de acercamiento a su favor, pero Pisa lo sobreseyó cuando el fiscal Diego López Ávila solicitó que se lo enjuiciara por desobediencia judicial y amenazas en 2017.El abogado Carlos Garmendia, a través de la Fundación María de los Ángeles, recordó además en declaraciones a la prensa que “en una de sus trece denuncias el juez Pisa resolvió desestimar el pedido de llevar a juicio al femicida para no dilapidar recursos y por falta de pruebas”.
Ana, la pareja de la docente, en tanto, contó que el femicida de Paola también la hostigaba a ella aunque aclaró que nunca les pareció “una persona capaz de accionar” y apuntó contra la familia de Parada Parejas: “En un momento, el hermano del acusado, que es un político (de la provincia), le decía a Paola que ella era la que se tenía que ir de la zona porque no estaban dispuestos a hacer ese sacrificio”, explicó. “¿Por qué se tenía que ir Paola de donde tenía sus dos colegios en los que trabajaba, su departamento y sus cosas? Por lo menos podrían haber hecho algo en el sentido de ponerle una pulsera o darle a Paola algún tipo de botón, o que la familia esté cuidando a ese tipo. ¿Quién mejor que ellos lo conocen para parar esto? Ellos sabían lo que él hacía”.
Áilean Fratkin, una ex alumna de Paola Tacacho y ex compañera de Parada durante los primeros meses de 2015 en el traductorado del Colegio Mark Twain de San Miguel de Tucumán, recordó en diálogo con Infobae que el femicida “no se daba con nadie, no hablaba y no quería hacer trabajos grupales para no dar su teléfono”y que la razón por la que abandonó la carrera fue una “mala nota” que le había puesto Tacacho: “Y por mala nota me refiero a un 8,50. Me acuerdo de eso porque estábamos sorprendidas de la reacción por esa nota”, contó la joven.
En septiembre de 2016, Paola, que había puesto al tanto a sus alumnas del hostigamiento que sufría, y que algunas de ellas sufrieron en carne propia también, le envió un mail a Áilean. “Quería avisarte que te puse de testigo en la causa por Mauricio”, le escribió. Ella le respondió que le escribiría cuando tuviera novedades pero finalmente nunca la contactaron de la Justicia.
Finalmente, el viernes pasado, cerca de las 21, Mauricio Parada siguió a Paola a la salida del gimnasio y, cuchillo en mano, la atacó por la espalda y la asesinó contra la vidriera de un local,dentro del cual había una cámara de seguridad que registró parte de la secuencia. Mientras Paola agonizaba en el lugar, un grupo de vecinos creyó que se trataba de un robo y lo cercó para evitar que se escapara. En ese momento, al verse rodeado, el hombre se clavó con fuerza el mismo cuchillo que había usado para asesinar a Paola en el medio del pecho y murió.
Este lunes, un grupo de alumnos del 6to. grado del Colegio San Patricio difundió un video en el que grabaron una serie de mensajes para recordarla, agradecerle y pedir justicia. “Te prometemos ayudar a cada mujer o niña que se sienta en peligro”, expresó uno de los chicos en homenaje a la docente fallecida.
Fuente Infobae.com