Gimnasia y Esgrima se encuentra ante una posibilidad inmejorable para incrementar el prestigio que se supo ganar desde su fundación hasta nuestros días.
El "Lobo" está a las puertas de ser reconocido como campeón de una competencia organizada por la AFA y que data de 1965, cuando la formación "mensana" de aquel entonces ganó el Campeonato Argentino de Clubes Campeones, el cual se disputó íntegramente en "la Bombonera".
En ese certamen, la representación blanquinegra venció en los cinco partidos disputados frente a otros campeones regionales de la Argentina.
Pasaron casi seis décadas de aquel logro, que se consumó luego de vencer a Talleres de Entre Ríos en la final.
De esta manera, el club del Parque sumaría su primera estrella a nivel nacional gracias a que sería oficialmente reconocido ese mini torneo por la Asociación del Fútbol Argentino.
EL ANTECEDENTE
En estos días, la AFA reconoció recientemente a Atlético Tucumán como campeón del Campeonato Argentino de Clubes campeones., que también se disputó a comienzos de la década del '60. Los equipos jugaban en Buenos Aires y el certamen se jugaba anualmente. En este mismo escalafón están los cordobeses Talleres y Belgrano, además de Gimnasia y Esgrima de Mendoza.
EL DERECHO DEL LOBO
Gimnasia y Esgrima había ganado el derecho de participar en ese torneo en 1965 por haber logrado quedarse como el mejor equipo de la Liga Mendocina de Fútbol en el año anterior. Allí ya contaba con el consagrado Víctor Antonio Legrotaglie como su exponente máximo.
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LA ENTREVISTA RADIAL A "PIKÍN"
Uno de los participantes de este certamen nacional fue Osvaldo Esteban "Pikín" Nuñez. El delantero mensana de esa época habló en el programa "Ídolos y Anónimos", conducido por Jorge Barbieri y Orlando Abraham y repasó recuerdos de aquel Lobo de los 60s.
A sus 79 años de edad, Nuñez disfruta de la vida y del fútbol. "Veo todos los partidos. Yo soy hincha de Gimnasia y Esgrima y de River Plate. Aunque no es el mismo fervor que vivo como cuando veo a River Plate -soy hincha fanático- a Gimnasia y Esgrima lo llevo siempre en mi corazón" expresó.
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Al hablar de aquel equipo "mensana" que participó del Campeonato de clubes campeones, comentó: "Tengo unos recuerdos muy hermosos porque fue un grupo muy lindo que compartimos todas las delegaciones en el Hotel City en Buenos Aires. Cada provincia mandaba su campeón del año 1964 y Mendoza fue representada por Gimnasia y Esgrima".
Y añadió: "Yo, por un estado febril que tuve en los primeros partidos, no pude jugar y sólo jugué contra Boca Juniors en el segundo tiempo. Gimnasia tenía muy buen equipo y ganó el torneo de manera invicta ante los equipos del interior del país. Si lo comparábamos con Boca, se notó la diferencia en el estado físico porque nosotros teníamos dos jugadores en la defensa -Bustos y Videla, cracks totales- pero Boca tenía un delantero como Pianetti que era muy rápido y que fue imposible marcarlo".
"Además, en ese equipo de Boca estaba una de las leyendas del club, Ángel Clemente Rojas, "Rojitas". Yo jugué contra él. Un genio total, una cintura incomparable. Podía ir en velocidad dominando la pelota, para de repente y enganchar para otra dirección siempre dominando la pelota. Me deslumbró como jugador. Si ese muchacho hubiese sido zurdo sería comparado con Lionel Messi. Pero, como era derecho, no lucía tanto como sí se percibe en el jugador que domina la pelota con la pierna zurda".
Al hablar de uno de los íconos del club de calle Lencinas, como lo era Legrotaglie, Nuñez reconoció: "Desde comienzos de la década del '60 Víctor fue ídolo en Gimnasia y Esgrima. Lo que le favoreció mucho es que era zurdo. De haber sido derecho, a lo mejor, hubiera pasado desapercibido. Víctor tenía una zurda mágica y era el dueño de los tiros libres y de esquina que disponía el equipo. Ídolo total, sintetizó.
Nuñez también hizo referencia a otro de los destacados jugadores de esa época, como Oscar Montes de Oca. "Con el físico que tenía se llevaba puesto a toda la defensa rival siendo que era gordito y formido, más que el mismo Juan Gilberto Funes", comparó. "Oscar llegó a Gimnasia y Esgrima proveniente de Banfield. Era un muy buen jugador"
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"Yo me hice hincha de Gimnasia y Esgrima porque admiraba esa delantera que tenía el Lobo: Converti, Curi, Víctor Legrotaglie, Montes de Oca, Ledesma y Landi", reconocíó aquél joven que en ese momento tenía 14 años.
Y continuando con las anécdotas sobre Oscar Montes de Oca, Nuñez, entre risas, compartió: "Recuerdo que cuando llegaba de las vacaciones siempre venía con algunos kilos de más y para bajarlos rápido se envolvía con cámaras de auto todo su cuerpo para transpirar y quemar grasas lo más rápido posible. Oscar era un delantero con mucha fuerza para llegar al gol" agregó.
DEL RECONOCIMIENTO A LA DESILUSIÓN
Oscar Nuñez fue el goleador de Gimnasia y Esgrima en el torneo local en el año 1963. Al año siguiente jugó poco porque volvieron al club los jugadores que habían participado en otros equipos como Montes de Oca en Palmira, Víctor Legrotaglie en Chacarita y "Polaco" Torres en Banfield. Al retornar a Gimnasia y Esgrima esos grandes futbolistas, a Nuñez lo bajaron a jugar a la Reserva.
"Cuando eso sucedió dejé de ilusionarme. Por eso, comencé a trabajar en el Banco de Previsiòn Social -lo hice durante algo más de 31 años- Primero ingresé como auxiliar y llegué hasta gerente del banco" explicó.-
"Si bien me vinieron a ver de otros clubes, Gimnasia y Esgrima no quiso venderme porque era el único reemplazo de Montes de Oca"
Con algo de nostalgia, Nuñez expresó su desilusión. "Me desilusionó mucho el fútbol. En un momento creí tocar el cielo con las manos y cuando volvieron al club los grandes jugadores, me pasaron a la Reserva y no me gustó. Iba en contra de mi voluntad se sinceró.
Más allá de esta desilusión, cabe este reconocimiento porque es uno de los dos jugadores de aquella formación que siguen vivos y por eso era tan importante el testimonio.