Según el Indicador de Precios en Origen y Destino (IPOD) elaborado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), en julio los precios de los agroalimentos se multiplicaron por 3,1 veces del campo (origen) a la góndola (destino). Es decir, el consumidor pagó $3,1 por cada $1 que recibió el productor.